Las casas de los campesinos Mayas no presentaban una misma forma, aunque entre ellas predominaron la planta rectangular y oval.
Por lo general, los materiales utilizados para las paredes fueron el adobe y la caña, y la paja para el techo.
Los pisos eran de tierra apisonada.
Como en casi todas las culturas prehispánicas, el mobiliario fue escaso y la ventilación y la luz por medio de ventanas casi nulas.
En la casa, las mujeres realizaban casi todas las tareas.
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